¿Cómo conoció este Programa que realiza la Fundación Menudos Corazones en el Hospital Gregorio Marañón?
A través de la propia fundación, durante los ingresos hospitalarios.
¿Cuánto tiempo lleva participando?
No sabría decir desde cuándo, ya que cuando Gádor comenzó con los ingresos hospitalarios prolongados, siempre hemos contado con el apoyo de Menudos Corazones.
Al principio era una de sus psicólogas la que se quedaba con ella en la habitación, recuerdo que jugaban, y luego también empezaron a venir los voluntarios.
¿Cómo consideraría que cambió la calidad de vida de su hija por participar en los talleres?
Mejoró su calidad de vida en cuanto que aprendía valores a través del juego, se relacionaba con otros niños y en aquellos momentos en los que no podía salir de la habitación la acompañaron jugando, leyendo...
¿Cree que está influyendo de forma positiva en su salud?
Sí, ya que anímicamente se encontraba mejor y ello repercute en su estado general.
¿Podría contarnos qué destacaría de estas actividades?
Que trabajan el desarrollo motor y cognitivo a través de juegos, de talleres, de manualidades, de la relación con otros niños...
¿Cree que ésta es una actividad con la que deberían contar todos los hospitales?
Sí, es imprescindible para los niños hospitalizados.
Este proyecto está financiado con fondos de la casilla de Actividades de Interés Social, la "X Solidaria", ¿cómo cree que repercutiría en el proyecto el que dejara de recibir fondos de esta casilla?
Creo que sería más difícil realizarlo, puede que imposible, ya que todos los recursos con los que se tiene que llevar a cabo tienen un coste económico.
Si los 9 millones de contribuyentes que aún no marcan la X Solidaria la marcaran, se podrían financiar muchos más proyectos como éste ¿Qué le diría a estas personas que no marcan la "X Solidaria"?
Que piensen que cuando un niño está ingresado en un hospital su estancia no se debe limitar a las cuatro paredes de la habitación, que hay momentos en los que verdaderamente está muy malito y no puede hacer otra cosa que descansar, pero también hay muchos días en los que está "bien", pero debe de permanecer ingresado y es en esos días en los que se le debe proporcionar una estancia lo más parecida al resto de los niños. 24 horas al día en un hospital es mucho tiempo y, gracias a programas como este, cambia mucho su percepción del ingreso durante estos tiempos.
¿Cómo les animarías a decidirse a marcarla?
Si fuera posible, les permitiría que vieran cómo son de felices nuestros niños cuando participan en actividades no cotidianas a las de un ingreso hospitalario.
¿Y qué le diría a esos más de 10 millones de contribuyentes que sí la marcan, dando posibilidad a 470 ONG a desarrollar 1.272 programas?
GRACIAS por hacer posibles ratos de felicidad a nuestros niños en momentos tan difíciles.
Y para terminar, ¿le gustaría enviar un mensaje?
Gracias a Menudos Corazones por hacer felices a nuestros niños, por estar en todo momento y porque sabemos que contamos con vosotros.
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